En el caso de que tengamos que pasar por un taller para arreglar algún desperfecto en la carrocería de nuestro vehículo todos querremos obtener el mejor resultado posible. Como expertos en el trabajo de la chapa y pintura en Bilbao sabemos que cualquier impacto o arañazo puede darnos quebraderos de cabeza. Por eso lo mejor es dejar el arreglo en manos de profesionales.

La mayor preocupación que suelen presentar los propietarios de un vehículo es la de que el pintor consiga igualar el color de la pintura original. Para conseguirlo es necesario un trabajo previo con luz para reconocer los daños y las diferencias de tonalidades antes de comenzar a trabajar.

Como profesionales de la chapa y pintura en Bilbao sabemos que después de esa primera visualización es bueno que el usuario conozca los procesos existentes para la reparación y repintado de su coche. De este modo, conseguiremos que el cliente sepa qué puede pedirle al pintor para acabar satisfecho una vez retire el coche del taller.

Hay piezas, como alerones o paragolpes, que pueden tener un tono ligeramente distinto de fábrica, pues se pintan separadamente para poder acceder fácilmente a todas sus zonas. Debemos reconocer el alcance de los desperfectos, ya que hay veces que es mejor solicitar el repintado completo para evitar diferencias de tonalidad.

Si después de analizados los daños nos damos cuenta de que se encuentran en un número reducido de piezas, podemos decantarnos por el difuminado: esto consiste en barnizar las zonas lindantes con la pieza en cuestión para igualar, gracias a la pericia del pintor, el color general.

En Ruizar contamos con los mejores expertos, con amplios conocimientos en colorimetría, y las herramientas informáticas necesarias, como es el espectrofotómetro. Todo al servicio de dar con la fórmula de color exacta que logre dejar nuestro vehículo como recién salido de fábrica.