La mayoría de nuestros clientes acuden a nuestro servicio de chapa y pintura en Bilbao tras un roce concreto o un accidente, pero a veces se trata de problemas que parecen aparecer “solos” y que en realidad se deben a trabajos anteriores poco profesionales o condiciones atmosféricas complicadas al dejar el vehículo a la intemperie.
Una de esas desagradables sorpresas son las bolsas de aire en la pintura del coche. A veces tardan en notarse pero ocurren en el proceso de pintado de la carrocería, por usar una presión de aire inadecuada para ese tipo de pistola o de pigmento, por proyectar la pintura a una distancia que no es la correcta o a una velocidad que no corresponde a ese trabajo.
Otro problema que puedes tener si no acudes a un taller profesional de chapa y pintura en Bilbao es la aparición de manchas. Si hace poco que lo pintaron y aun así aparecen partes blanquecinas, probablemente se ha usado una mezcla mal hecha y los distintos componentes de la capa de pintura no han ligado bien.
La humedad es otra causa de dolores de cabeza para los que necesitamos tener la chapa y pintura perfecta. Si pintamos en un ambiente húmedo o no dejamos que se seque bien el coche después de lijarlo al agua, pueden aparecer ampollas, un defecto que puede deberse también a que se ha intentado pintar sobre manchas de grasa o zonas oxidadas sin aplicar el debido tratamiento previo.
En Ruizar somos especialistas en chapa y pintura y puedes contar con nosotros para desperfectos pequeños o para darle un nuevo aire a todo tu vehículo, ya sea industrial o particular.