Gracias a nuestra experiencia como taller de chapa y pintura en Bilbao, hemos podido resolver numerosos problemas de arañazos y golpes en la carrocería de muchísimos coches. Somos conscientes que estamos hablando de uno de los problemas estéticos que más preocupan a los conductores, ya que a nadie le gusta ir en un automóvil que tenga estas marcas.

Lo primero que tenemos que dejar claro es que habrá que diferenciar entre los diferentes tipos de arañazos que puede tener un coche, que pueden ir desde leves hasta graves, dependiendo del número de capas de pintura que se hayan visto afectadas. Tenemos que recordar, desde nuestro taller de chapa y pintura en Bilbao, que normalmente hay cuatro en cada coche: la transparente, la de color, la base y el acero.

Lo menos dañino que podemos sufrir, los microarañazos, puede ser reparados fácilmente con un buen pulido de la carrocería. Los rasguños leves se suelen referir a aquellos que afectan, como mucho, a las dos primeras capas de pintura (transparente y color). Estamos hablando de los típicos roces con llaves, anillos o arbustos. En estas ocasiones, podremos optar también por utilizar una pulidora eléctrica.

Los más graves, los que muestran otro color al de tu carrocería, son muy complicados de reparar si no es por parte de profesionales. Lo mejor que puedes hacer es lavar y secar bien la zona. Aplica  un pincel de retoque de la pintura de tu coche y espera unas horas a que seque. Ahora podrás lijar el arañazo para devolver el volumen al nivel del resto de la zona. Para conseguir el mismo brillo que el resto, pule y, por último, aplica cera para sellar la pintura.

En Ruizar somos especialistas en la reparación de todo tipo de golpes y arañazos en la carrocería de un coche. Nuestros profesionales podrán atenderte y asesorarte sobre las mejores opciones para tu caso concreto.